Después de pasar algún tiempo «refugiados» en Cadiz se plantea el inevitable momento de volver.

.. y no es que no tenga ganas o que que sea algo que no he hecho antes, pero hay algo diferente en este viaje.
Estos días, preparando las cosas de vuelta me he dado cuenta que la maleta va muy vacía. Es una tontería, pero no se por que para mi ha sido muy significativo.
Los que habéis vivido fuera sabéis que viajar de vuelta con la maleta vacia es una utopía (incluso algunos pensarán que un sacrilegio). No aprovechar el peso permitido para llevarte esas cosas que echas de menos en la ciudad donde vives es algo impensable. El miedo de la llegada a facturación y ver que la cifra que marca la bascula de la aerolínea superaba los 22 kilos permitidos es algo por lo que hemos pasado todos.
Si es verdad que las circunstancias de este viaje han sido diferentes y que no es una época en la que tenga que llevarme muchas cosas. Aún así me ha generado una sensación extraña.
Siempre que he vuelto al país donde vivía me he llevado un poco de España conmigo. Comida, regalos de amigos, fotografías o algún que otro objeto que me unía al país que me vio crecer. Creo que lo hacia para seguir estando conectado con este país.
Pero son ya 15 años, y cada uno de estos me ha ido cambiando un poco.
Las fotografías han dejado paso a la era digital. Las fotografías físicas son mas objetos de culto que otra cosa. Ya no viajo (al menos no siempre) con cámara y portátil. El móvil ha desplazado un poco a todo eso.
El acceso universal a internet y la implantación de «la nube» ha permitido que sea mucho mas sencillo acceder a las cosas que necesitas en cualquier parte. Incluso esa cosa de traerte algo que no haya, a estas alturas hay muy pocas cosas que no se puedan conseguir.
Aún así hay cosas que aun (por suerte o por desgracia) no son de acceso universal. Y son esas cosas las que podría meter en la maleta, pero me he dado cuenta que prefiero disfrutarlas cuando estoy aquí, con la gente que esta aquí.
Otra razón por la que hay hueco en mi maleta puede ser por que después de tantos años tengo todo lo que necesito en el país que ahora me acoge y no necesito buscar nada de España. Da un poco de vertigo pensar que esto puede ser cierto, supongo por las implicaciones que tiene. Cuando decidí dejar España lo hice con la idea de volver algún día. Creo que es una de las mayores mentiras que me he colado a mi mismo.
O simplemente es que estoy pensando demasiado las cosas (como siempre).
No se.. ya veremos 🙂
Uy. Eso es porque no hemos quedado para comprar “mierdas”. Cuando se vaya el bicho tu maleta vuelve a llenarse tonto.
Me gustaMe gusta
.. eso espero. 🙂
Me gustaMe gusta