Mas de 90 días son ya los que llevamos en casa, a una semana de que se levante el confinamiento en suiza.
No esperes en este post un análisis sobre la situación actual, ni una batalla épica ni nada parecido. Han sido 90 días (mas o menos) desde que decidimos quedarnos en casa.
Como siempre me ha pasado, con el tiempo, se me olvidarán las sensaciones y todo lo que se me paso por la cabeza. Y como esto es para lo que empece este blog, pues aquí lo dejo.
Creo, si no recuerdo mal, es el mayor periodo de tiempo que yo he pasado sin salir de casa y sin interactuar (directamente) con otra gente. Ni siquiera cuando he estado malo. Lo más siempre han sido unos 15 días, pero tanto….
Todo empezó en Marzo. Ya llegaban noticias del Covid19 y dada la situación de suiza (cercana a uno de los focos mas azotados por la infección) se recomendó en le trabajo que nos quedaremos en casa.
Estoy acostumbrado a trabajar en remoto. No es la primera vez que trabajo un largo periodo de tiempo desde un sitio que nos sea la oficina. Por motivos familiares he estado haciendo en periodos de casi un mes. Así que en principio no me supuso mucho esfuerzo.
Organizarnos en casa, intentar ser productivo los días que iba a estar en casa, vamos, lo que se dice intentar sobrellevarlo. El mayor problema que me enocntré era pasar de una rutina a otra en tan poco periodo de tiempo. Creo que el ser humano no esta diseñado para cambios tan drásticos en tan poco tiempo.
Aparte el miedo y la histeria colectiva que ves a tu alrededor. Las noticias no eran alentadoras y las herramientas que necesitas no estaban preparadas para la presión de todo el mundo haciendo uso de ellas en remoto. No estoy hablando de herramientas de trabajo, sino las cosas que sueles hacer normalmente.
Ir a la compra se convirtió los primeros días en un juego de superación. Las empresas de envío no estaban preparadas para un incremento de esas magnitudes en tan poco periodo. Y eso sin hablar de lo que estaba ocurriendo en referente al virus. Las noticias de la zona de Italia y de España no eran tranquilizadoras. A veces no sabia si dejar de ver las noticias y vivir en la ignorancia o estar informado de lo que pasa.
El estar pendiente de todo lo que iba pasando y de los cambios hizo que Marzo se terminara mas o menos rápido .. pero Marzo (normalmente) da paso a Abril….
y en Abril no salimos absolutamente para nada. No es que tuviéramos miedo o hayamos estado pachuchos, simplemente que intentamos minimizar cualquier posibilidad. Conciencia cívica que lo llamaban los políticos aquí.
Abril fue un mes de intentar buscar esa rutina de la que hablaba antes. La gente que me conozca sabe que no soy una fiesta andante, pero estar en casa mucho tiempo hace que me vuelva loco. Tengo que hacer algo, me gusta interactuar con gente, me gusta hablar. Y si, aunque la tecnología hacer que eso sea muy fácil no es lo mismo.
Las noticias sobre la situación en todas partes seguían sin ser alentadoras. Empiezo a ser consciente de una forma u otra de que estoy va a ser una carrera de fondo y que no es algo que va a desaparecer en pocos meses. Algo en mi se resiste a aceptar esta situación como algo normal. Empiezo a echar de menos mi antigua rutina, y empiezo a darme cuenta (de manera subconsciente) que hay muchas cosas que van a cambiar este año.
Y por suerte no hay Abril sin Mayo.
Cansado de esta situación. Buscando cosas con la que mantenerme entretenido le doy vueltas a todo esto. Mi cabeza necesita hacer planes. Todos los planes que hago requieren estar fuera de aquí, fuera de esta realidad. No se si mantenerme ocupado me esta haciendo mas mal que bien. Supongo que todo el mundo esta igual. En el trabajo todos estamos mas o menos echos a la idea de que esto va para largo, pero no sabemos hasta cuándo.
Y llegamos a Junio… un poco con la vista en el que va a pasar. Me gusta pensar que de alguna forma u otra voy a ser capaz de volver a una normalidad, pero ya se que supone esa nueva normalidad.
Las dudas en el trabajo se aclaran. No volveré a la oficina hasta por lo menos principio de 2021. A partir del 8 de Junio el país abre, y podremos salir (con las precauciones pertinentes). Nunca he estado trabajando desde casa tanto tiempo y nunca he estado encerrado tanto tiempo. Por lo menos ya “casi” no vuelvo loca a Ociore.
Se que soy un privilegiado en esta situación y que solo es cuestión de acostumbrarme a algo nuevo. Por suerte tengo un punto claro para fijarme en el y para poder dirigirme a el. Aún me quedan un par de cosas que optimizar en casa y seguro que cuando la situación del virus se calme volveré a ver a mis amigos y compañeros.
Mientras tanto intentaré crear una rutina que me resulte cómoda. Va a ser el periodo de tiempo mas largo trabajando desde casa que yo he vivido.