Pasan los años, hasta el punto que contarlos no resulta algo novedoso. A veces incluso se me olvidan contarlos. No se si es el miedo a ponerle números y fechas u otra cosa. Siempre me ha parecido que las cosas son menos grandes si no las nombras (o simplemente no existen)
Mas de una decada me separa ya de mis decisiones. Mas de una década de ver pasar amigos e historias. Tengo que echar mano a las milles de fotos que voy dejando para el recuerdo para recordar la gente que ha pasado. Algunas de ellas probablemente no tenga forma ahora mismo de como contactarla.
Milles de kilómetros recorridos, por el aire, por carretera y a pie. Pequeños sitios en el mundo que han guardado mis secretos a los que durante un tiempo he llamado hogar.
Pero hay una cosa que me ronda la cabeza estos días, una pregunta sencilla (en apariencia)
¿ Que pasa en el mundo cuando dejo de contar ?
Me he dado cuenta que contar los años, los países, las casas en las que he vivido me hace siempre mirar hacia atrás. Se consciente de lo que has conseguido esta bien, pero hasta que punto.
Ayer, durante un rato deje de contar. Deje de mirar a lo que ha pasado y por un momento me di cuenta que tal vez las cosas importantes no estén atrás en el tiempo, sino adelante.
He vivido una aventura muy chula, ya es hora de dejar de contar y empezar a buscar la siguiente.. ¿No?
Buenas, es que os mudáis otra vez?? Jejeje
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Jajaja, ya te contesto yo, Pablo. Que yo sepa, no, no nos mudamos… 😛 (lo dicho, que yo sepa… :P)
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No, no nos mudamos. La verdad es que suiza me ha ganado. Me apetece quedarme aqui por mucho tiempo.
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Ains, nuestro apartamentito en Londres, con mis flores de plástico de Ikea Bologna y las macetas de enredaderas que nos dió en custodia Elvira antes de marcharse… :_).
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Esa foto me encanta. Siempre me genera una sensacion de fecidad que no puedo describir. Creo que si tuviera que ponerle un titulo la llamaria HOGAR.
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